Presuntos narcotraficantes cavaron al menos dos zanjas profundas en una carretera para incomunicar el municipio de Aguililla, en Michoacán, donde en los últimos meses se ha registrado un éxodo de más de tres mil habitantes. El sacerdote católico Salvador Sánchez, vocero de la Arquidiócesis de Apatzingán, a la que pertenece Aguililla, informó este domingo que habitantes denunciaron que un grupo de hombres armados realizaron dos zanjas en la carretera Apatzingán-Aguililla, en la región Tierra Caliente de Michoacán.