6
El Inegi pidió a mexicanos de entre 25 y 64 años que se autoclasificara en una escala cromática de once tonos. Desde el más claro (K) hasta el más oscuro (A). Una vez definido el color de piel se interrogó a los encuestados sobre su escolaridad, y sobre su oficio o su profesión. Se les preguntó también cuánto ha mejorado su situación económica entre la infancia y la actualidad.
Tres de los tonos de piel más claros de la escala (I, J, K) cuentan con estudios de nivel superior. Solo el 25% de las tres tonalidades más oscuras (A, B, C) alcanza el nivel profesional.
De las personas que se autoclasificaron en los tonos de piel más claros, solo 10% no cuenta con algún nivel de escolaridad. La cifra se eleva a 20.2% en el caso de las personas que se autoclafisificaron en las tonalidades más oscuras.