El presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que si todos los mexicanos fueran cristianos y profesaran el amor a los pobres, los débiles y los humildes, entonces se podría vivir en una sociedad mejor, "yo soy cristiano y quiero aclararlo". En La Mañanera desde Palacio Nacional, sede del Poder Ejecutivo, afirmó que es un seguidor del pensamiento de Jesucristo porque es el luchador social más importante que ha existido en el mundo.