Desde hace unas semanas la Radio Universitaria –la única su tipo en frecuencia abierta— suena distinta: fresca dirán algunos, hispter revirarán otros. Más allá de adjetivos, la llegada del escritor Ricardo Cartas a la dirección de Radio BUAP trajo consigo la inclusión de más de 20 programas nuevos, sin eliminar los ya existentes, lo que significa que en estos momentos la estación ofrece más de 70 programas semanales, y se incluyeron ritmos musicales que poco se tocaban en la radio como la música afrocaribeña. Para insertar la nueva programación, que incluye espacios infantiles, juveniles, de música pop, de arte, cultura urbana y ciclista, y nuevas tecnologías, se aprovechó la barra matutina que durante años se tuvo como una barra musical basada en tres líneas básicamente: el rock, el jazz y la música clásica. También se abrió espacio entre las 9 y 9:30 am para que cualquiera que tenga interés en programar música pueda hacerlo, previo solicitud del espacio en la estación. El proyecto incluye la creación de un consejo consultivo que analizará la programación total, es decir programas nuevos y programas ya existentes, para definir cuáles de estos seguirán y cuáles desaparecerán de la frecuencia universitaria. Difícilmente los cambios no generan reacciones, ya sea públicas o privadas, y las modificaciones en Radio BUAP no han sido la excepción. Hay quien se siente cómodo con la nueva programación y hay quien prefiere la programación anterior. Al buzón de Lado B llegó hace un par de semanas la perspectiva de un lector y colaborador ocasional al respecto, y como el debate de los medios públicos –y Radio BUAP es un medio público— puede ayudar a la creación de mejores contenidos y sobre todo abona a la consolidación de audiencias más exigentes, decidimos pedir a otro lector-colaborador ocasional su opinión al respecto. A continuación presentamos ambas, a partir de ellas que cada quien saque sus propias conclusiones.